Tras la entrevista a Kike Garrándés, vamos a presentar hoy en Bicheando.net a nuestro tercer compañero en este reciente proyecto divulgativo: Alejandro García Salmerón, que esperamos en 2017 nos ayude a que el proyecto siga creciendo en cantidad y calidad, para llegar al máximo número de personas interesadas en la naturaleza y en esa pequeña biodiversidad que nos rodea.
Alejandro García Salmerón es un catalán que está actualmente a punto de acabar el grado de Biología Ambiental en la Universidad Autónoma de Barcelona. Miembro del Grup de Recerca de l’Escola de Natura de Parets (GRENP) hasta 2018. En 2016 empezó a colaborar con la Societat Catalana d’Herpetologia (SCH) elaborando un pequeño informe sobre las poblaciones de anfibios de Vallvidrera (Barcelona). Desde 2017 forma parte de la Junta Directiva de la SCH como vocal, donde ha llevado a cabo y hoy participada en varios proyectos herpetológicos.
Es un apasionado de la naturaleza y ocupa gran parte de su tiempo en comprender las leyes que la rigen, así como conocer cada día mejor la gran diversidad vegetal y faunística que nos rodea. Su cuaderno de campo y su cámara le acompañan allí donde bichea… 🙂
Pasemos a conocerlo un poco más…
Alejandro, ¿Tu afición por la biología y la herpetología viene de lejos o ha sido una afición tardía?
La atracción por el medio ambiente me viene de muy lejos. He tenido la suerte de que mi abuelo también es un apasionado por la naturaleza y podría decir que prácticamente desde que sé caminar él se ha encargado de transmitirme esos valores y sentimientos.
¿Algún recuerdo temprano..?
Yo soy de Barcelona, de un barrio en la falda de Collserola, y recuerdo cómo mi abuelo me llevaba muy a menudo por las mañanas a pasear por esta montaña, a la vuelta a casa los documentales de Félix Rodríguez de la Fuente en el televisor eran mi principal fuente de distracción durante la hora de comer.
Siempre he sido un chico curioso, con la mirada más pendiente de lo que me podía encontrar en el suelo que de prestar atención al frente. Las lagartijas pardas del parque de al lado de mi casa ya me conocían, igual que las pequeñas larvas de sapo partero, habían sido inspeccionadas varias veces por un niño de menos de medio metro que se dedicaba a «molestarlas».
La herpetología, de la manera como la conozco ahora empezó a interesarme a los 16 años, a raíz de mi treball de recerca de Bachillerato: les serps i el seu estudi etològic. Desde entonces el estudio de la diversidad, especialmente herpetológica, se ha vuelto mi pasión.
¿Porque estudias biología? ¿Crees que habrá trabajo cuando termines?
¿Sabes la frase de «búscate un trabajo que te guste y no tendrás que trabajar en tu vida»? Pues con ésta puedo resumirte la respuesta a la primera pregunta.
Todo el mundo sabe que no es fácil ni la carrera de Biología ni la búsqueda de trabajo posteriormente. Seguramente hay un número de graduados muy elevado en proporción con la oferta laboral deseada por la gran mayoría, pero una ciencia que se dedica al estudio de algo tan extenso como es la vida por lógica presenta equivalentes salidas al mundo laboral.
El principal «problema» que le veo a la situación laboral de un biólogo es la temporalidad de la gran mayoría de los trabajos que puede desempeñar, ya que acostumbran a ser de naturaleza temporal.
¿De qué y dónde te gustaría trabajar?
Si te soy sincero, es una pregunta que me hago muy a menudo porque no la sé ni yo. Me gusta la conservación y me atrae también mucho el mundo de la filogenia y evolución, pero poco a poco, estoy seguro de que mis dudas se responderán solas con el paso del tiempo.
Como bien dices, la situación de los «científicos» en España, Cataluña no es la ideal… ¿qué opinas al respecto? ¿Qué oyes de tus compañeros en la universidad?
Tienes razón, tanto en Cataluña como en España la situación de los científicos no es como para poder presumir. Comparando con otros países, la financiación para la investigación nacional es muy baja, pero también creo que es un reflejo de la concienciación y el valor de importancia que le otorga la sociedad.
Mis compañeros de carrera tienen opiniones muy diversas, pero bien es cierto que la sensación de incertidumbre respecto a un futuro laboral está compartida y pocos tienen pensado se investigadores como objetivo, ya que a la dificultad de los años de carrera se le suman la necesidad de hacer un máster, una tesis doctoral y un postdoctorado.
Cambiando de tema… Respecto a la protección de la flora y fauna y de la biodiversidad, en Cataluña… ¿cómo lo ves? ¿Se está avanzando, en líneas generales? ¿Se hace lo suficiente para concienciar sobre los hérpetos y su importancia en los ecosistemas y como patrimonio de todos?
A grandes rasgos es la misma que en España. Si le preguntas a una persona ajena a este «mundo» te dirá que todo está protegido, en cambio, si le preguntas a cualquier naturalista responderá como yo. La gran mayoría de animales protegidos son vertebrados, y dentro de éstos la implicación económica en su gestión y conservación se centra especialmente en las denominadas «especies bandera», es decir, las más comerciales.
Un buen ejemplo es que si tienen que invertir en la conservación de un oso o lince lo harán antes que si tuvieran que hacerlo de un líquen amenazado.
Hay que tener en cuenta que el estatus de «protegido» de una especie muchas veces es únicamente una etiqueta y no se hace nada, o poco, por revertir su situación precaria.
Creo que poco a poco se está avanzando, y cada vez hay más implicación política y social, opino que también es debido a que cada vez es más alarmante la presión que ejercemos sobre el medio ambiente y los resultados son patentes y muy preocupantes.
Para concienciar sobre la herpetofauna se hace lo que gente como nosotros puede, por ejemplo: dedicar nuestro tiempo libre a mostrar, para concienciar.
Sabemos que los anfibios son el grupo zoológico más amenazado del planeta, la destrucción de su hábitat y sobretodo la acción de los hongos quitridios y ranavirus juegan un papel fulminante en sus poblaciones autóctonas.
Los reptiles padecen la misma destrucción del hábitat, y a las serpientes se le suma otro problema ancestral como es el miedo y la ignorancia por parte de la población que provoca que los ofidios mueran por causas no naturales. Nunca se hace lo suficiente cuando se habla de concienciar sobre estos vertebrados.
¿Por dónde sueles bichear más? ¿Qué lugar o zona te gusta especialmente, que hayas descubierto últimamente?
Suelo ir mucho por los alrededores de Barcelona. Por proximidad y porque estos últimos años mi medio de transporte ha sido una moto 250, los lugares que más frecuento son Collserola, el Garraf o el Delta del Llobregat.
Me gusta mucho Aigüestortes y el Montseny, aunque esta segunda es una montaña que si no sabes dónde buscar puedes no llegar a ver apenas nada.
¿Por qué otras zonas de la Península Ibérica has bicheado? ¿Cuál de ellas vamos a conocer juntos este año, ;-)?
– He estado en muchas Comunidades Autónomas, cabe decir que el suroeste peninsular es la zona que menos he visitado. Es verdad que buscar fauna no lo he hecho en todas, por tanto aún me quedan sitios por visitar, y yo ilusionado con ello.
Me gustó mucho Galicia, hay mucha riqueza herpetológica allí, por norma general siempre verás algo, pero si tengo que escoger me quedo con Cataluña, ya que presenta un abanico inmenso de hábitats distintos y cada uno alberga especies diferentes, no sólo de anfibios y reptiles.
El único «inconveniente» que le encuentro a la búsqueda de herpetos en Cataluña es que la densidad de estos grupos de vertebrados no es especialmente alta, lo que te obliga a esforzarte más para buscar algunas especies más escasas, pero eso es más apasionante. En cuanto a zonas que me gustaría conocer serian Andalucía y Portugal, dónde existe una diversidad excepcional así como grandes estudiosos de ésta.
Pero si tengo que escoger me quedo con Cataluña, ya que presenta un abanico inmenso de hábitats distintos y cada uno alberga especies diferentes, no sólo de anfibios y reptiles.
Y hablando de víboras, hérpetos o bichos ibéricos, ¿ Qué género o especie te atrae más?
Uf esta pregunta es difícil… me atrae el género Calotriton, con especies peninsulares como C. asper y C. arnoldi, pero tengo que decir que siento una debilidad especial por las serpientes, por lo que puedo afirmar con seguridad que la especie que más me atrae es la culebra de Esculapio (Zamenis longuissimus); me parece un animal muy curioso, con hábitos y hábitat distinto al resto de especies peninsulares, y su coloración y elegancia en el movimiento son únicos.
Y especies que te llamen la atención de otras partes del mundo… ¿Por qué?
Uno de los ofidios que me encantaría ver en su hábitat natural es la víbora del Gabón (Bitis gabonica); desde pequeño me ha atraído este vipérido, enorme, mortal y con un patrón digno del más bello de los cuadros de Picasso.
También me gustaría ver mucho el sapo de Surinam (Pipa pipa), invito a todos a ver algún video de cómo se reproduce, o el Moloch australiano (Moloch horridus), debe de ser una pasada verlo de cerca.
Tengo que decir que todas y cada una de las especies me llaman la atención, todas tienen algo peculiar y único.
En Bicheando.net, como sabes, abogamos por la divulgación y acercamiento de la herpetología a las personas de la calle, principalmente, a través de nuestra propia experiencia de campo como aficionados y estudiosos de este maravilloso mundo. ¿Qué esperas aportar, en este sentido, al proyecto?
Primero de todo ganas de trabajar y de crear nueva información y de manera más accesible a todos los públicos. Como he dicho antes, nunca es suficiente la acción de concienciación a la sociedad sobre la situación de este grupo de vertebrados tan interesante y amenazado. En este sentido nosotros tenemos la oportunidad de ejercer un papel cabal en el despertar del sentido protector de la gente hacia la herpetofauna.
Personalmente puedo contribuir en Bicheando.net con nuevos conocimientos, conceptos y experiencias, además de fotografías de cada una de éstas. Cuantos más creadores o divulgadores de información seamos más grandes podremos llegar a ser como grupo y a más gente podremos hacer llegar nuestro mensaje, que no es otro que conocer para valorar y valorar para conservar.
Tu primer artículo va a tratar de serpientes y víboras, ¿verdad? y cómo diferenciarlas… ¿Por qué crees que las víboras en nuestra cultura están tan mal vistas?
El miedo sumado al desconocimiento son sus peores enemigos. La ofidiofobia (miedo a las serpientes) está muy extendida, sobretodo en zonas rurales donde frecuentan las víboras.
Si a estos factores se le suman la gran cantidad de cuentos y creencias populares que retratan a las víboras como seres diabólicos el resultado es el que tenemos, una regresión de la distribución y una disminución de su abundancia.
Soy consciente de que no es un tema tan fácil. Nuestra posición es muy tajante, pero mucha gente, sobre todo los que están acostumbrados a tratar día tras día con según que especies «peligrosas», presentan otra serie de premisas como son la seguridad y la preocupación por los menos preventivos.
Por lo que para proteger a animales de compañía e infantes optan por la opción fácil de exterminar cualquier vipérido en lugar de liberarlo en un lugar libre de altercados.
Mi próximo artículo en Bicheando.net tendrá como objetivo desmitificar a estos excepcionales controladores de plagas así cómo aprender a diferenciarlos de las culebras.
¿Y qué se podría hacer para intentar fomentar un mayor respeto y una mayor concienciación sobre ciertas especies?
Divulgar y demostrar que cada una de las especies presentan un papel en la naturaleza, muchas veces insustituible. Cuando algo se conoce y se comprende se acaba respetando, como he comentado antes.
Recomienda a los lectores un libro sobre herpetología, biología o guía de campo que te guste especialmente…
Voy a recomendar las dos guías que me han acompañado durante los últimos años. La primera es Amfibis i Rèptils de Catalunya, País Valencià i Balears (en catalán) ed.Lynx y la segunda es Reptiles y Anfibios Guía de Campo ed.Omega.
jeje, yo tengo la guía de campo también desde bien pequeño…
Ya terminando Alejandro, ¿Quién te inspira y motiva actualmente en torno a la biología y la herpetología? ¿A quién agradecérselo?
– Mi pasión por la naturaleza me viene gracias a mi abuelo, como dije anteriormente. Durante los años de carrera he tenido el placer de conocer a gente de diez que me está ayudando mucho a crecer como herpetólogo. Mi pasión por este campo siempre ha ido in crescendo y tanto buenas experiencias como malas me han hecho madurar en muchos aspectos.
Al estar tanto en la universidad como en el GRENP y SCH me ha enseñado diferentes perspectivas y maneras de trabajar, a ellos les doy las gracias de corazón.
Hoy estoy muy agradecido a la SCH por apostar por mi y confiar, estamos haciendo muchas cosas buenas para incrementar el conocimiento y conservación de nuestra fauna, y por ello estoy muy ilusionado.
Por último, imagina que tuvieras el poder de convertirse en un reptil o anfibio cuando lo deseases… jeje ¿Cuál sería?
En un basilisco o lagarto de Jesucristo (Basiliscus basiliscus), eso de poder correr sobre el agua debe de ser una pasada jaja
Jaja pues un placer de entrevista y ¡bienvenido!, gracias por formar parte de Bicheando.net y esperamos ese primer artículo ya que nos crecen los colmillos del ansia… 🙂