Conociendo a los anfibios y reptiles de la Península Ibérica

especies de galápagos de españa

Quelonios de la Península Ibérica: GALÁPAGOS AGUA DULCE. Volumen 2.

Continuamos nuestra serie de 3 artículos sobre los tipos de tortugas o quelonios ibéricos, cuya primer capítulo trataba sobre las tortugas de tierra ibéricas, con las dos especies de galápago de agua dulce que habitan nuestros lagos, embalses y ríos:

  • El galápago leproso (Mauremys leprosa). Galápago acuático.
  • El galápago europeo (Emys orbicularis). Galápago acuático.

El galápago leproso (Mauremys leprosa) es el más abundante y está mejor distribuido, ya que se adapta a numerosos ecosistemas y es menos exigente con la calidad del agua, la dieta, la competencia con especies invasoras etc. mientras que el galápago europeo (Emys orbicularis) es una tortuga más exigente con la «pureza» de los ecosistemas donde habita, principalmente.

Galápago leproso (Mauremys leprosa)

Galápago leproso (Mauremys leprosa). Créditos: Alberto González

galápago europeo (Emys orbicularis)

Galápago europeo (Emys orbicularis). Créditos: Alberto González

Las dos especies de galápagos ibéricos con de talla pequeña o mediana (unos 25-30 cm longitud del plastrón), si tenemos en cuenta los tamaños gigantescos que pueden alcanzar otras especies de América como la Tortuga Chapanera (Podocnemis expansa) con casi un metro de plastrón.

Mapa aproximativo de distribución:

Dicho esto, no es raro verlas juntas en muchos lugares ya que han evolucionado parece ser para no competir por el alimento ni por los recursos espaciales (zonas de soleamiento o puesta). E igualmente juntas como separadas pueden ser cazadas y depredada por muchos tipos de animales como jabalíes, zorros, nutrias, cigüeñas, garzas o aves rapaces.

Ambas son principalmente carnívoras y ambas buscan siempre solearse y coger temperatura en la medida que pueden durante el día, ya que la radiación ultravioleta sigue siendo muy importante para mantener sus funciones vitales.

Aunque son eminentemente acuáticas, todas las tortugas del mundo, incluidos nuestros galápagos, ponen sus huevos en tierra, siendo además bastante ágiles en sus paseos terrestres y pudiendo hacer grandes sprins si se sintieran amenazadas.

mauremys leprosa junto a emys orbicularis

Ambas especies compartiendo punto de soleamiento… Créditos: Javier Álvarez (www.anfibiosyreptileslarioja.blogspot.com)

Créditos: Javier Álvarez (www.anfibiosyreptileslarioja.blogspot.com)

Créditos: Javier Álvarez (www.anfibiosyreptileslarioja.blogspot.com)

Sea como fuere, las dos especies están en recesión (con excepción de M. leprosa en Cataluña) y es primordial conocerlas para ser conscientes del gran valor ecológico que representan estos animales bellos e inofensivos que moran nuestros ríos y lagunas. De hecho gozan de una protección especial por parte de la Unión Europea y de la Convención de Berna, estando totalmente prohibida su captura, tenencia y venta.

En definitiva, son unos de los reptiles más amenazados de toda Europa. Si se las manipula, hay que tener cuidado por ellas y por nosotros también, pues es frecuente que estén parasitadas y pueden portar la salmonella.

Como curiosidad decirte que necesitan estar en el agua para tragar la comida ya que no producen saliva. Así que pueden coger alimentos que estén en tierra pero la mayoría de las veces se los llevarán dentro del agua para consumirlos. Cuando veas uno fíjate bien en esta características y es posible. Y sin más dilación vamos a empezar con su descripción, especie a especie… 🙂

1. Galápago leproso (Mauremys leprosa)

El galápago leproso (Mauremys leprosa) es la especie por descontado más común en nuestros pantanos, lagos y ríos… distribuyéndose por gran parte del territorio peninsular, si bien es escasa en toda la cordillera cantábrica. Es raro que no lo hayas visto porque es bastante visible ya que pasa mucho tiempo soleándose allí donde habita. Puede también encontrarse esta especie en Portugal, el sur de Francia, Marruecos, Argelia y Túnez.

Dos galápagos leprosos (Mauremys leprosa) soleándose juntos -Marruecos-. Créditos: Ander Izaguirre http://naturzalia.blogspot.com/

Neonato galápago leproso (Mauremys leprosa) soleándose juntos -Marruecos-. Créditos: Ander Izaguirre http://naturzalia.blogspot.com/

Vive en ríos y embalses pero, dependiendo del ecosistema, puede incluso llegar a prosperar en las pequeñas balsas de agua creadas para el ganado en la Dehesa ibérica.

El calificativo de «leproso» se debe a varias causas y características etológicas de la especie: primero al mal olor que desprende cuando es capturada. Segundo a las algas que a veces le crecen en el caparazón o las placas que les cuelgan al cambiar de piel y por último que los primeros ejemplares que se examinaron para nominar la especie, eran viejos y presentaban suturas infectadas en los caparazones que hacían recordar a una suerte de lepra entre las escamas.

Galápago leproso (Mauremys leprosa)

Galápago leproso (Mauremys leprosa) -Huesca-. Créditos: Enrique Ruiz Ara (www.ruizarafoto.es)

Galápago leproso (Mauremys leprosa)

Galápago leproso (Mauremys leprosa) -Huesca-. Créditos: Enrique Ruiz Ara (www.ruizarafoto.es)

Pero en general, este calificativo puede perfectamente haberse creado porque no les importa vivir en aguas sucias o eutrofizadas (contaminadas por purines o heces de la producción ganadera, por ejemplo) y normalmente tiene un aspecto bastante desgastado.

Aunque es una tortuga de color anodino, gris o pardo tirando a rojizo en general, sin manchas ni dibujos cuando es adulta, los ejemplares juveniles son mucho más coloridos, presentando rayas amarillentas o anaranjadas en el cuello, cara,patas y plastrón ( a veces se las confunde por esto con especies invasoras como la tortuga de orejas rojas -Trachemys s. elegans- o la tortuga de orejas amarillas americana –Trachemys s. scripta-)

Es una tortuga netamente carnívora, al contrario que las tortugas de tierra ibéricas. Se alimenta de anfibios y sus larvas, de todo tipo de artrópodos, peces, lumbrícidos etc. y también de carroña. También puede ingerir alimentos vegetales como frutos o tallos tiernos, pero es raro o bien no está lo suficientemente documentado.

En cuanto a sus subespecies, tenemos la subespecie nominal peninsular (M. l. leprosa) y la M. l. saharica, que se distribuye en Marruecos, al sur y al este del Atlas, que presentan unos característicos ojos azules.

2. Galápago europeo (Emys orbicularis)

El galápago europeo (Emys orbicularis) es una especie de tortuga que presenta un caparazón oscuro punteado de pequeñas manchas amarillas. Habita en el centro y sur de Europa, Asia Occidental y la zona mediterránea de África. En España se distribuye de forma muy discontinua y fragmentada en pequeñas poblaciones desde el sur hasta el norte, siendo muy escasa por la cordillera cantábrica (Galicia, Asturias, Cantabria…) y algo más común en Pais Vasco.

galápago europeo (Emys orbicularis)

Galápago europeo (Emys orbicularis). Créditos: Sebastian Gómez. (www.sebasgr.com)

galápago europeo (Emys orbicularis)

Galápago europeo (Emys orbicularis). Créditos: Sebastian Gómez. (www.sebasgr.com)

Sea como fuere esta distribución peninsular podría hacerte ver que es una especie próspera y en crecimiento pero no es así. Este bello quelonio está en clara recesión (sobre todo en el centro y sureste peninsular) por la contaminación de las aguas y la competencia con otras especies de galápagos alóctonos, más fuertes y resistentes. También destacar que sus juveniles sufren caza o depredación por parte de especies invasoras de peces como el lucio y el black bass, además de mamíferos como el visón americano y las ratas o los gatos.

Vive cerca o en cursos de agua y zonas con cierta corriente (no tanto en embalsamientos estancados) hasta los 1.000 m. de altitud como máximo. Prefiere sitios con abundante cobertura vegetal y algo de corriente.

Galápago europeo (Emys-orbicularis)

Galápago europeo (Emys orbicularis). Créditos: Alberto González

De dieta casi exclusivamente carnívora (incluyendo gusanos, anfibios, lumbrícidos, peces, carroña…) de esta especie tímida y huidiza que está catalogada desde «Vulnerable» hasta «En Peligro» en zonas de la costa este mediterránea y centro peninsular. ¡¿Cómo no te va a gustar esta preciosa criatura de destellos amarillos?!

Eso sí. Es tan amplia su distribución que se dice que es «una sola especie con multitud de subespecies». Tenemos dos subespecies presentes en la península: la Emys o. fritzjuergenobsti y la Emys o. hispánica. El resto son (pueden variar según autor) Emys orbicularis marmorata (del oeste), Emys orbicularis capolongoi (Cerdeña), Emys orbicularis colchica, Emys orbicularis eiselti, Emys orbicularis galloitalica (Italia), Emys orbicularis hellenica (Oeste de Turquía), Emys orbicularis iberica (Valle de Kura), Emys orbicularis lanzai (Córcega), Emys orbicularis luteofusca (Turquía central), Emys orbicularis occidentalis (Norte de África), Emys orbicularis orbicularis (comuna de Europa), Emys orbicularis persica (del este) y Emys orbicularis orientalis (del Caspio)

3. ¿Cómo diferenciar M. leprosa de E. orbicularis?

Son relativamente fáciles de diferenciar de cerca, pues mientras que el galápago leproso es una tortuga más aplanada de color gris o marrón rojizo uniforme, con las patas y cuello algo más pálidos o amarillentos, el galápago europeo es tiene un caparazón más abombado, negro y repleto de pintas amarillas.

El galápago leproso tiene un cuello muy largo que gusta alargar cuando toma el sol mientras que el galápago europeo es más corto y por lo tanto su cabeza nunca se separa tanto del cuerpo, por decirlo así.

Los ojos también son bastante diferentes y una clave dicotómica de identificación si tienes la oportunidad de fijarte: en galápago leproso el ojo es verde con una línea oscura que lo atraviesa mientras que en el galápago europeo es marrón con pintitas amarillas o tirando a rojizo, dependiendo de si es macho o hembra

4. ¿Cómo diferenciar machos de hembras en los galápagos?

En general, la diferenciación de machos y hembras (dimorfismo sexual) también en galápagos se efectúa por la vía de los caracteres sexuales secundarios. Los machos, de medida más pequeña, tienen una cola larga, robusta y gruesa en su base. En las hembras, la cola es pequeña y corta.

Además, los machos adultos presentan una concavidad en el plastrón (su barriga es cóncava al contrario que las hembras que la tienen plana) para facilitar la cópula, en el momento de la monta en la espalda de la hembra.

Competencia entre el galápago de Florida y los galápagos autóctonos

El galápago de Florida (en sus diferentes versiones -especies-) se ha establecido también en la península Ibérica, donde coloniza todo tipo de masas de agua gracias a su gran capacidad de adaptación. Hoy en día existen poblaciones autónomas de mayor o menor densidad en diversas marismas y humedales de la franja litoral, así como en puntos dispersos del interior. Especies invasoras de galápagos en la península Ibérica.

Galápago de Florida (Trachemys scripta elegans)

Galápago de Florida (Trachemys scripta elegans). Créditos: Diario de Navarra.

  1. Tortuga de orejas rojas o Galápago de Florida (Trachemys scripta elegans)
  2. Tortuga de orejas amarillas (Trachemys scripta scripta)
  3. Galápago de Cumberland (Trachemys scripta troostii)
  4. Falsa tortuga mapa (Graptemys pseudogeographica)
  5. Falsa tortuga mapa del Mississipi (Graptemys kohni)
  6. Tortuga Cooter de Nelson (Pseudemys nelsoni)

Ante tal presión (muchas gente nunca a visto un galápago autóctono y si decenas de alóctonos) la situación de estas dos especies nativas es preocupante. Los «galápagos de Florida» son más fuerte y resistentes a los cambios de temperatura, estivación e hivernación, mostrando entradas en el agua más tempranas tras la hivernación.

Además son más agresivos y dominantes (lucha por zonas de soleamiento) y maduran sexualmente antes y tienen una mayor descendencia. Por si esto fuera poco son mucho más voraces y tienen dietas más flexibles y no tan especializadas como nuestros galápagos.

Y si has leído hasta aquí te vamos a hacer un último regalo a la vista. Unas estupendas fotografías acuáticas cedidas de Javier Murcia (www.javiermurcia.es) para tu disfrute.

En resumen, dos especies de galápagos de los que aún faltan muchos datos e información para poder conservarlos en nuestros ecosistemas como lo que son, joyas vivientes naturales y patrimonio natural de todos nosotros.

Gracias por leernos y muy pronto nuestro tercer y último artículo sobre tortugas ibéricas: las tortugas marinas.

Fuentes consultadas:

https://asanda.or/documentos/animales-silvestres/manual-identificacion-galapagos.pdf
http://anfibios-reptiles-andalucia.org/especies.htm
http://www.vertebradosibericos.org/reptiles/maulep.html
http://www.vertebradosibericos.org/reptiles/emyorb.html
http://siare.herpetologica.es/
Ayres, C., Cordero, A. (2007). Site tenacity in European pond turtle (Emys orbicularis) hatchlings in N.W. Spain. Amphibia-Reptilia, 28: 144-147.

Portada: David Venero y Enrique Ruiz.

Anterior

Quelonios de la Península Ibérica: TORTUGAS DE TIERRA. Volumen 1.

Siguiente

Quelonios de la Península Ibérica: TORTUGAS MARINAS. Volumen 3.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Funciona con WORDPRESS & Tema de Bicheando.net 2022